La automatización, la Inteligencia Artificial (IA) y el Big Data son ejemplos de tecnologías disruptivas que se han vuelto omnipresentes en la vida cotidiana de la raza humana y llegaron para cambiar todo tipo de dinámicas tradicionales para siempre. Por ejemplo, en el campo laboral, la automatización de procesos en los trabajos tiene muchas ventajas ligadas a una mayor productividad; sin embargo, la mayor preocupación de muchos profesionales es que sus carreras se vuelvan obsoletas en los próximos años, o más bien, que sean robadas por robots.
Los robots vienen por nuestros empleos, ¿verdad o mito?
Hoy en día, cada vez más procesos en fábricas y hasta en profesiones como contabilidad y medicina están siendo sometidos a la automatización y, como consecuencia, siendo completados por robots o algoritmos. Las ocupaciones que requieren tareas en gran medida rutinarias tienen un mayor riesgo de declive y según esto los sectores más afectados son los de bodegas de almacenamiento y el comercio minorista. Así pues, no hay duda de que la automatización afectará los empleos de los humanos. Más sin embargo, las mismas tecnologías se encargarán de generar otros empleos. Según el informe Robotlucion del BID, “las estimaciones del WEF (2016) auguran que 65% de los niños que están en escuela primaria trabajarán en empleos que hoy no existen” tal como hace unas décadas atrás no existían los programadores de aplicaciones web.
Si la automatización de procesos rutinarios es un hecho, ¿qué quiere decir esto para Recursos Humanos?
Se prevé que profesiones como las de Recursos Humanos prevalecerán en medio de la revolución de la industria 4.0 puesto a que las ocupaciones que a menudo involucran la gestión y el entrenamiento de personal al igual que la toma de decisiones, planificación estratégica o trabajo creativo serán muy difíciles de automatizar. Muchos de los profesionales y líderes de este campo están tomando iniciativas en cuanto al profundo impacto que ya están generando las tendencias derivadas de la automatización, la transformación digital y hasta la globalización en el campo laboral. Lo último se traduce a una modificación necesaria de estructuras y en el estilo de organización tradicional de las empresas. A raíz de esto, los profesionales de Recursos Humanos en gran parte tienen la tarea de reformular la forma en que atraen, reclutan, entrenan, recompensan y dirigen al personal de sus organizaciones. Sencillamente, el criterio por el que se regían hace algunos años para llenar los puestos vacantes y satisfacer los estándares de las habilidades que se creían que eran importantes en ese momento, ya no pueden seguir siendo sus puntos de referencia para buscar talento. En cambio, para lograr que los seres humanos y las tecnologías más temidas, como los robots programados con IA y la automatización, puedan llegar a trabajar en colaboración mutua y generen los mejores resultados con base en las necesidades del futuro digital, los profesionales de Recursos Humanos se deben enfocar en atraer habilidades que las máquinas jamás podrán remplazar.
¿Cuáles serán las habilidades con mayor demanda en el futuro?
Primero que todo, la estructura jerárquica de autoridad con líneas claras de responsabilidad en las organizaciones se ha vuelto cada vez más obsoleto. Por esta razón, se ha identificado la importancia del papel de Recursos Humanos en formar líderes para cada uno de los roles requeridos en las empresas. Más sin embargo, los profesionales de Recursos Humanos estarán en la búsqueda de ciertas habilidades como el fundamento sólido que les permitirá capacitar a los mejores candidatos. Según un estudio conducido por Oxford Economics, basado en encuestas hechas a 352 profesionales de Recursos Humanos, las habilidades de liderazgo con mayor demanda dentro de los próximos 5 a 10 años son:
Agilidad con negocios digitales:
La transformación digital en las empresas cada vez más requiere que el personal tenga habilidades para trabajar virtualmente, hacer diseños digitales, tener conocimiento de marketing digital- incluyendo redes sociales, Ecommerce y Web 2.0- contar con entendimiento de informática, software y sistemas corporativos para poder desempeñarse en ecosistemas completamente sumergidos en el mundo cibernético.
Interpersonales y de comunicación:
El poder comunicarse efectivamente será una de las habilidades de alta demanda en el medio laboral. Debido a la globalización, la facilidad de construir equipos de trabajo, fomentar la lluvia de ideas, co-creatividad, fomentar relaciones sólidas con proveedores, socios de outsourcing y sobretodo clientes, a pesar de las diferencias culturales y distancias geográficas, será de suma importancia para las empresas. Las organizaciones del futuro buscarán alinearse mucho más con el desarrollo de una red corporativa en línea lo cual refleja uno de los mayores cambios corporativos el cual, como lo mencioné anteriormente, es el remplazo de la dinámica tradicional comando-control por un estilo más colaborativo entre equipos de trabajo.
Flexibilidad de operación global:
Esta habilidad va ligada con la última que acabamos de mencionar. Una vez más, la adopción de la globalización por parte de muchas empresas juega un papel muy importante en la estructura corporativa del futuro puesto que a parte de integrar talentos a nivel global también tiene el propósito de penetrar nuevos mercados para fomentar la innovación. Lo último quiere decir que los productos y servicios del mercado interno son liderados por los mercados emergentes puesto que se deben adaptar a los clientes extranjeros. Por ende, la flexibilidad de operar en mercados del exterior y la comprensión de dichos negocios internacionales será una capacidad clave en los líderes del futuro.
Pensamiento Ágil:
En un mundo de cambios constantes y de avances tecnológicos, la capacidad de preparación para escenarios múltiples es cada más vital. La encuesta a varios líderes de Recursos Humanos, en la que basó su estudio Oxord Economics, refleja que ellos le dan una alta prioridad al pensamiento innovador y al manejo de escenarios complejos.
Te puede interesar leer
Lo que está frenando la transformación digital de las empresas
Chatbots: ¿el futuro de la comunicación corporativa?
